Fenómeno Climático: ¿Qué se Sabe sobre la Próxima Temporada de Lluvias?
Pronósticos Meteorológicos para los Próximos Meses
Según los últimos pronósticos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (SENAMHI), la próxima temporada de lluvias se extenderá desde noviembre de 2025 hasta abril de 2026, con patrones de precipitación que variarán según la región geográfica del país.
En la región costera, se espera un inicio temprano de la temporada lluviosa, con precipitaciones ligeramente por encima de lo normal. Las lluvias comenzarían a partir de mediados de octubre y se intensificarían en noviembre.
En la región interandina, incluyendo la Sierra, las lluvias tendrían un inicio más tradicional en diciembre, con acumulados que se mantendrían dentro del rango promedio histórico, aunque con posibles variaciones locales.
En la región amazónica, se prevén lluvias más intensas de lo habitual, especialmente en los departamentos orientales, donde se espera un aumento del 15-20% en los acumulados normales para el período.
Fenómenos Climáticos que Influirán en la Temporada
Los expertos del SENAMHI han identificado que el fenómeno climático La Niña está condicionando este año el comportamiento de las precipitaciones. La Niña, caracterizada por temperaturas más frías de lo normal en el Pacífico Ecuatorial, generalmente produce efectos opuestos a El Niño.
En el contexto local, La Niña tiende a intensificar las lluvias en la región amazónica, mientras puede producir condiciones ligeramente más secas en la costa, aunque este patrón puede verse modificado por otros factores atmosféricos regionales.
Además, se están monitoreando otros fenómenos como las ondas tropicales y los efectos locales de calentamiento del Pacífico Sur, que podrían incrementar la variabilidad del tiempo durante la temporada.
El cambio climático también está influyendo en los patrones tradicionales de precipitación, causando temporadas más impredecibles y con eventos extremos de mayor intensidad.
Posibles Consecuencias: Inundaciones, Deslizamientos y Afectaciones a la Agricultura
Las autoridades de Gestión de Riesgos han advertido sobre la posibilidad de eventos extremos durante la temporada lluviosa, incluyendo inundaciones urbanas y deslizamientos en zonas de ladera. Las áreas con deficiente sistema de drenaje son especialmente vulnerables.
Las zonas bajas y ribereñas, especialmente las cercanas a ríos y quebradas, requieren una vigilancia especial durante eventos de lluvia intensa. Se espera coordinar con gobiernos locales para la preparación de planes de contingencia.
El sector agrícola también se verá afectado, con posibles pérdidas en cultivos de ciclo corto si se presentan lluvias excesivas en periodos críticos del desarrollo vegetativo. Los cultivos de arroz, maíz y banano son particularmente vulnerables.
Por otro lado, las lluvias intensas podrían causar desbordes en embalses y sistemas de riego, afectando tanto a la producción agrícola como a la generación de energía hidroeléctrica.
Recomendaciones de Protección Civil
La Secretaría de Gestión de Riesgos recomienda a las comunidades ubicadas en zonas de riesgo que tomen precauciones antes del inicio de la temporada lluviosa. Esto incluye limpiar canales de drenaje, reforzar estructuras precarias y preparar planes de evacuación.
Las autoridades locales deben revisar y actualizar sus planes de contingencia, coordinar con instituciones de salud para garantizar la atención médica en caso de emergencias y preparar albergues temporales.
Para las áreas urbanas, se recomienda mejorar los sistemas de alcantarillado pluvial, mantener limpios los colectores y prohibir la construcción en zonas de riesgo conocido.
Las comunidades deben estar atentas a los boletines de alerta temprana del SENAMHI y seguir las instrucciones de las autoridades en caso de activación de protocolos de emergencia.
Comparación con Temporadas Anteriores
La temporada de lluvias 2024 se caracterizó por un inicio tardío pero con intensidad superior a lo normal, especialmente en la región amazónica, donde se registraron eventos extremos que causaron afectaciones significativas.
En 2023, la temporada tuvo un comportamiento más regular, aunque se registraron rachas de lluvia inusualmente intensas en marzo, que provocaron inundaciones en varios sectores urbanos.
Comparando con años anteriores, se observa una tendencia a la mayor variabilidad climática, con temporadas más impredecibles y con eventos extremos de mayor frecuencia e intensidad.
Los expertos indican que esta variabilidad se debe en parte al cambio climático, que está alterando los patrones históricos de precipitación y aumentando la ocurrencia de eventos extremos.