La Policía capturó a tres militares, que estarían vinculados a organizaciones terroristas, con USD 100 000.

La Policía capturó a tres militares, que estarían vinculados a organizaciones terroristas, con USD 100 000.

La Policía capturó, con información de las FF.AA., a un militar en servicio activo y dos en servicio pasivo por estar presuntamente vinculados a grupos terroristas. Otros cinco uniformados también están siendo investigados por nexos con el crimen.

Tras la entrega de información por parte de las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional capturó a un militar en servicio activo, y dos miembros en servicio pasivo, con USD 100 000 que no pudieron justificar, en Quito.

El operativo policial se realizó en el parqueadero del restaurante. Las FF.AA. presumen que Héctor C. V., Jairo A.L., y Orlando J.M. están vinculados con grupos terroristas.

Los encontraron en el interior de un vehículo tipo jeep. Las Fuerzas Armadas rechazaron contundentemente todo acto vinculado con grupos terroristas, y señalan que continuarán trabajando en la depuración de personal que actúen en contra de la institución.

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Cinco militares son investigados por vínculos con presos

No son los únicos militares que son investigados por presuntas conexiones con la delincuencia. También se investiga a otros cinco uniformados, por su accionar durante las operaciones de control en las cárceles.

Los expedientes administrativos fueron abiertos por la inspectoría del ejército para determinar la responsabilidad de los uniformados y establecer la sanción disciplinaria.

El primer caso se registró el 25 de enero, cuando un soldado aceptó su responsabilidad en el hurto de una computadora en el Centro de Rehabilitación Social de Cotopaxi, después de una operación de control en los pabellones de este centro carcelario.

Los otros uniformados son investigados por facilitar el acceso de alimentos, celulares, entre otros objetos, a los Centros de Rehabilitación Social en donde las Fuerzas Armadas tienen el control, desde el 9 de enero, cuando el presidente Daniel Noboa declaró el estado de excepción por grave conmoción interna.

Las investigaciones se manejan bajo reserva hasta que termine el proceso administrativo-disciplinario interno. La Ley de Personal y Disciplina Militar tipifica estos hechos con falta grave: es decir, los implicados corren el riesgo de salir de la institución.

El pasado viernes se abrió otra investigación interna en el ejército por la fuga de tres presos de la militarizada cárcel de Cotopaxi. El presidente ratificó la presencia de las fuerzas armadas en las cárceles hasta que el estado retome el control. El 9 de marzo ampliará el estado de excepción durante 30 días.